CARDO MARIANO/ Silybum marianum
Es una planta siempre muy vigorosa, que puede alcanzar una altura de metro y medio; florece a partir del mes mayo. Tiene una gruesa raíz, da lugar a un rosetón de hojas grandes alabeadas, de 30 cm de largo, rodeada de dientes irregulares y espinas coriáceas, verdes y brillantes, recorridas por nervios blancos. La cabezuela es grande como una alcachofa, con las brácteas u hojas externas terminando en una recia espina. Las flores tienen color de rosa y los estambres interiores están soldados en un solo haz.
Se cría en lugares incultos, al borde de senderos o muros y carreteras de todo el país. Los frutos de este cardo es de 6 a 7mm, lisos y moteados. Por su contenido en algunos elementos albuminoides, taninos y otros principios desmenuzados y cocidos se obtienen diversas aminas, histaminas y agmatinas. Los que padecen de presión baja sanguínea pueden encontrar un remedio contra el desfallecimiento, también para combatir ciertas jaquecas y, erupciones del tipo de las urticarias.
Se cría en lugares incultos, al borde de senderos o muros y carreteras de todo el país. Los frutos de este cardo es de 6 a 7mm, lisos y moteados. Por su contenido en algunos elementos albuminoides, taninos y otros principios desmenuzados y cocidos se obtienen diversas aminas, histaminas y agmatinas. Los que padecen de presión baja sanguínea pueden encontrar un remedio contra el desfallecimiento, también para combatir ciertas jaquecas y, erupciones del tipo de las urticarias.
Se machacan previamente en un mortero las semillas y luego se procede a la cocción en una proporción de una onza de los frutos, 28,41gms, por litro de agua, se puede aumentar la parte de los frutos, pues no son tóxicos; generalmente se dosifica a una cucharada sopera por hora.
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